TRATAMIENTO CANNABIS SEVILLA

Podemos ayudarte.Consigue dejar el cannabis.


¿Piensas que podrías haber desarrollado una dependencia o tienes la sospecha de que un ser querido o conocido podría padecerla?.

Sin un tratamiento completo y una terapia integral para la adicción al cannabis puede llevar a múltiples consecuencias negativas tanto físicas como psicológicas.

  • Discreción

  • Tratamiento sin ingreso

  • Trato individualizado

  • Equipo Multidisciplinar: Psiquiatra, Psicólogos, Terapeutas e Instructores en Mindfulness

  • Instalaciones acogedoras.

  • Horarios flexibles para compaginar la terapia con tus responsabilidades laborales y familiares

  • Asistencia 24 h

CÓMO SUPERAR LA ADICCIÓN AL CANNABIS

El paso inicial para superar la adicción al cannabis es buscar asistencia en profesionales especializados.

Ubicados en el centro de Sevilla, te ofrecemos un tratamiento de calidad para superar la adicción al cannabis. Nuestro objetivo es ayudarte no solo en la abstinencia, sino también a identificar y comprender los factores psicológicos subyacentes de la adicción.

  • Ayudar a la persona y su familia a tomar conciencia del conflicto antes de que se produzcan situaciones límites (ingresos hospitalarios, accidentes, maltrato, pérdidas económicas…)


  • Identificar y diagnosticar correctamente la dependencia y sus posibles complicaciones.


  • Promover la participación familiar en el proceso terapéutico. Ayudar a la familia a tomar conciencia de sus propias dificultades para facilitar en ellos el cambio.


  • Alcanzar el logro de los objetivos de normalización social, laboral y familiar que la persona se proponga.


  • Educar en hábitos saludables para un ocio libre de drogas.


  • Favorecer el crecimiento personal reconociendo y aceptando los límites e identificando y potenciando los recursos de la persona.

Esta sustancia a menudo se considera una «droga suave», poco adictiva y de origen natural, especialmente en comparación con otras drogas más duras. Esto ha llevado a que su uso comience a edades cada vez más tempranas, alrededor de los 12 o 13 años, un período en el que el desarrollo neurológico y psicológico aún está en proceso.Hay indicios de que el consumo de marihuana podría contribuir al fracaso académico de los jóvenes y al distanciamiento de su círculo social más cercano. En tales casos, un diagnóstico temprano puede mejorar significativamente el pronóstico.

El consumo de cannabis se presenta generalmente de tres maneras: como «marihuana o hierba», hecha de las hojas secas, flores y tallos pequeños de la planta; «hachís o hash», que se produce al prensar la resina de la planta femenina formando un bloque marrón con un contenido de THC más alto (hasta un 20%) que la marihuana (5 al 10%), aumentando su potencial toxicidad; y «aceite de cannabis o aceite de hachís», un concentrado líquido obtenido al mezclar la resina con solventes como acetona, alcohol o gasolina, lo que resulta en una mezcla viscosa con altas concentraciones de THC (hasta un 85%). Este aceite se puede fumar mezclado con tabaco o consumir en infusiones, tortillas y repostería.

La fase de desintoxicación para aquellas personas que han desarrollado una adicción al cannabis, suele ser comparativamente más sencilla que otras sustancias. Sin embargo, las etapas de deshabituación y adaptación son más complejas, ya que el consumo de cannabis es frecuente en su entorno cotidiano. Estas etapas requieren de un enfoque motivacional hacia el paciente y la restauración de las capacidades cognitivas que se hayan podido deteriorar.

El pronóstico para estos pacientes es generalmente muy favorable, especialmente cuando comienzan a notar una mejora en su memoria, una disminución en sus bloqueos mentales, y una mayor agilidad en su capacidad de razonamiento. Además, cuando empiezan a interesarse de nuevo en diversas actividades y a disfrutarlas, es un signo positivo.

La adicción al cannabis, también conocida como dependencia a la marihuana, tiene varias implicaciones y consecuencias que pueden variar de una persona a otra. A continuación, se detallan algunos de los aspectos más significativos asociados con esta adicción:

  • Tolerancia y Dependencia: Al igual que con otras sustancias adictivas, el uso regular de cannabis puede llevar al desarrollo de tolerancia, lo que significa que se necesitarán cantidades mayores para lograr los mismos efectos. Esto puede conducir a una dependencia física y psicológica del cannabis.
  • Efectos en la Salud Mental: El uso prolongado de cannabis ha sido asociado con varios problemas de salud mental, como ansiedad, depresión y en algunos casos, trastornos psicóticos, especialmente en aquellos con una predisposición genética.
  • Impacto en la Cognición y el Rendimiento: El consumo frecuente de cannabis puede afectar la memoria, la atención, la coordinación motora y la toma de decisiones. Estos efectos pueden tener un impacto significativo en el rendimiento académico, laboral y en las actividades diarias.
  • Problemas Respiratorios: Fumar cannabis puede causar problemas respiratorios similares a los causados por el tabaco, incluyendo tos crónica, bronquitis y un mayor riesgo de infecciones pulmonares.
  • Alteraciones del Estado de Ánimo y Comportamiento: Algunas personas pueden experimentar alteraciones en su estado de ánimo y comportamiento, incluyendo irritabilidad, cambios de humor y disminución de la motivación, conocida como síndrome amotivacional.
  • Síntomas de Abstinencia: Aunque generalmente se considera que el cannabis tiene síntomas de abstinencia menos severos que otras drogas, los usuarios habituales pueden experimentar insomnio, irritabilidad, ansiedad, cambios de apetito y humor depresivo al dejar de consumirlo.
  • Riesgos Sociales y Legales: Dependiendo de la legislación local, el uso de cannabis puede llevar a problemas legales. Además, puede afectar las relaciones personales y sociales, y puede haber un estigma asociado con su uso.
  • Interferencia con Tratamientos Médicos: El cannabis puede interactuar con ciertos medicamentos y puede complicar el diagnóstico y tratamiento de condiciones médicas existentes.

Es importante destacar que la adicción al cannabis, al igual que cualquier adicción, varía en severidad y efectos de persona a persona, y su tratamiento debe ser personalizado y considerar todos los aspectos de la salud y bienestar del individuo.

Para identificar el consumo de cannabis, se pueden notar ciertos signos y síntomas que incluyen:

  • Aspectos conductuales: Tendencia a aislarse de personas que no forman parte del círculo de amigos consumidores, disminución en las interacciones familiares y sociales, preferencia por permanecer en sus habitaciones o pasar mucho tiempo fuera de casa. Se pueden percibir cambios en los hábitos alimenticios, como pérdida o aumento del apetito.
  • Cambios cognitivos: Dificultades con la memoria, distracciones frecuentes, olvidos, confusión, etc. Estos problemas pueden conducir a un rendimiento académico o laboral deficiente.
  • Alteraciones en la motivación: Disminución del interés en actividades previas, como pasatiempos, amistades, deportes y otras actividades físicas. Esto se asocia al síndrome amotivacional, un efecto conocido del consumo de cannabis.
  • Síntomas físicos: Ojos rojos (a menudo se usan colirios para disimular este síntoma), variaciones en el peso y pérdida de tono muscular, así como trastornos en los patrones de sueño.

¿Preocupado por tu consumo de cannabis o el de alguien cercano?

Recuerda, dar el primer paso puede cambiar tu vida.

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