TRATAMIENTO ALCOHOL SEVILLA

Podemos ayudarte.Consigue dejar el Alcohol.


¿Piensas que podrías haber desarrollado una dependencia o tienes la sospecha de que un ser querido o conocido podría padecerla?.

Sin un tratamiento completo y una terapia integral para la adicción al alcohol puede llevar a múltiples consecuencias negativas tanto físicas como psicológicas.

  • Discreción

  • Tratamiento sin ingreso

  • Trato individualizado

  • Equipo Multidisciplinar: Psiquiatra, Psicólogos, Terapeutas e Instructores en Mindfulness

  • Instalaciones acogedoras.

  • Horarios flexibles para compaginar la terapia con tus responsabilidades laborales y familiares

  • Asistencia 24 h

CÓMO SUPERAR LA ADICCIÓN AL ALCOHOL

El paso inicial para superar la adicción al alcohol es buscar asistencia en profesionales especializados.

Ubicados en el centro de Sevilla, te ofrecemos un tratamiento de calidad para superar la adicción al alcohol. Nuestro objetivo es ayudarte no solo en la abstinencia, sino también a identificar y comprender los factores psicológicos subyacentes de la adicción.

  • Ayudar a la persona y su familia a tomar conciencia del conflicto antes de que se produzcan situaciones límites (ingresos hospitalarios, accidentes, maltrato, pérdidas económicas…)


  • Identificar y diagnosticar correctamente la dependencia y sus posibles complicaciones.


  • Promover la participación familiar en el proceso terapéutico. Ayudar a la familia a tomar conciencia de sus propias dificultades para facilitar en ellos el cambio.


  • Alcanzar el logro de los objetivos de normalización social, laboral y familiar que la persona se proponga.


  • Educar en hábitos saludables para un ocio libre de drogas.


  • Favorecer el crecimiento personal reconociendo y aceptando los límites e identificando y potenciando los recursos de la persona.

El alcohol es una constante en nuestra cultura, apareciendo en eventos festivos, reuniones de familia y otras actividades sociales. Para algunos, sirve como una herramienta para vencer la timidez y relajarse, mientras que otros lo utilizan para aliviar el dolor, la tristeza o enfrentar problemas.

En los jóvenes, el inicio en el consumo de alcohol suele ser a una edad temprana, aproximadamente a los 13 años. A menudo, lo consumen en exceso y en poco tiempo, como en los conocidos botellones. Estas prácticas pueden conllevar a consecuencias dañinas para la salud, como intoxicaciones alcohólicas.

En INEA, nos dedicamos al tratamiento del alcoholismo, una adicción que, con ayuda adecuada, puede ser tratada y superada.

la dependencia al alcohol es una condición grave que implica mucho más que el simple consumo excesivo de alcohol. Abarca aspectos físicos, psicológicos y sociales, y su tratamiento requiere un enfoque integral y sostenido.

  1. Presencia Sin Embriaguez Continua: Una característica distintiva de la dependencia al alcohol es que puede existir incluso sin la necesidad de estar continuamente ebrio. Esto indica que la adicción no siempre es visible o evidente a través de un estado de embriaguez constante.

  2. Pérdida de Control sobre el Consumo: Un indicador clave de la dependencia al alcohol es la incapacidad de controlar el consumo. Esto se manifiesta en la dificultad para limitar la cantidad de alcohol ingerida y en el consumo compulsivo.

  3. Impacto en el Funcionamiento del Cuerpo: Se observan cambios negativos en la memoria, el estado de ánimo y las percepciones sensoriales, lo que conduce a un deterioro físico significativo.

  4. Síndrome de Abstinencia: Al dejar de consumir alcohol, se pueden experimentar síntomas de abstinencia. Estos varían en gravedad, desde ansiedad y nerviosismo hasta náuseas. En casos severos, pueden evolucionar a delirium tremens, una condición peligrosa caracterizada por confusión mental, delirios, alucinaciones y temblores intensos.

  5. Riesgo de Recaída: Incluso después de superar la fase de desintoxicación, el riesgo de recaída sigue siendo una preocupación constante. La sociedad y el entorno pueden incentivar el consumo de alcohol, por lo que es crucial que la persona aprenda a manejar estos estímulos para prevenir futuras recaídas.

Para identificar problemas relacionados con el alcohol, es importante examinar la tolerancia (la capacidad de consumir cantidades cada vez mayores), los síntomas de abstinencia (malestar y alteraciones en el comportamiento cuando no se consume alcohol), y los patrones de comportamiento. Además, se debe prestar atención a la pérdida de control sobre el consumo. Algunas señales a considerar incluyen:

  • Presencia frecuente de olor a alcohol.
  • Disminución del apetito y trastornos gastrointestinales.
  • Dificultad para recordar sucesos recientes.
  • Cambios en el comportamiento, como euforia inicial seguida de irritabilidad.
  • Negación del problema de alcoholismo.
  • Alteraciones en los patrones de sueño.
  • Ojos llorosos, enrojecimiento de la piel, habla incoherente, falta de coordinación y marcha tambaleante.
  • Consumo excesivo de alcohol, especialmente más allá de lo que se había planeado o podía controlar.
  • Descuido o errores en las responsabilidades sociales, familiares y laborales.
  • En el entorno familiar, se pueden dar situaciones de conflictos, crisis y hasta abuso. En el ámbito laboral, se manifiesta un incremento en el absentismo, disminución del rendimiento y aumento de accidentes.

Cuando la incapacidad de detener el consumo, a pesar de los efectos negativos físicos, familiares y sociales, se hace evidente, el alcoholismo se ha convertido en un problema serio que necesita intervención y tratamiento.

¿Preocupado por tu consumo de alcohol o el de alguien cercano?

Recuerda, dar el primer paso puede cambiar tu vida.

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